El uso de shampoo con sulfato es un tema que genera muchas opiniones en redes sociales, y comúnmente se afirma que los sulfatos son dañinos para el cabello. Sin embargo, esta idea no es del todo correcta, ya que los shampoos con sulfato cumplen una función importante en el cuidado del cuero cabelludo. Los sulfatos son agentes limpiadores que ayudan a eliminar de manera efectiva la suciedad, el exceso de grasa y los residuos de productos de peinado que se acumulan con el tiempo. Por esta razón, los shampoos con sulfato son útiles para lograr una limpieza profunda que otros productos, como los shampoos sin sulfato, no siempre pueden ofrecer.
Sin embargo, el uso frecuente de shampoo con sulfato puede ser contraproducente, especialmente para personas con cuero cabelludo y cabello secos, ya que estos productos tienden a eliminar también los aceites naturales del cabello, lo cual puede resecarlo. Por ello, una buena estrategia es alternar su uso: se recomienda utilizar shampoo con sulfato algunos días a la semana, para que realice una limpieza profunda y elimine cualquier acumulación en el cuero cabelludo.
Durante el resto de la semana, es ideal utilizar un shampoo suave sin sulfatos, sin sal y sin parabenos. Este tipo de shampoo limpia de manera más ligera, manteniendo la hidratación natural del cabello y evitando que las puntas del pelo largo se resequen. Alternar entre ambos tipos de productos ayuda a lograr un equilibrio: el cuero cabelludo permanece limpio y libre de residuos, mientras que el largo del cabello se mantiene saludable y nutrido.